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Una catarata es una opacidad del cristalino del ojo.
Al principio, las cataratas pueden ser asintomáticas, pero con el tiempo pueden provocar visión nublada o borrosa. Los ojos también pueden volverse sensibles a la luz intensa.
Generalmente, las cataratas están relacionadas con la edad, por lo que son más comunes en personas de edad avanzada. También pueden deberse a la exposición a la radiación ultravioleta dañina del sol, a los malos hábitos alimenticios, al tabaquismo, a la diabetes y a la presencia de esta afección en la familia.
Si tiene cataratas pero no experimenta ningún síntoma, o si solo afectan levemente a su visión, es posible que no requiera tratamiento. Si las cataratas empiezan a afectar a sus actividades diarias, se puede sustituir el cristalino opacificado con cirugía, lo que puede ayudarle a recuperar la vista.